Lo extraño del cine

No llega a dos semanas desde que se clausurara la entrega de los premios que la Academia de Cine Español concede a las mejores películas del año, no obstante algunas cintas han dado alguna que otra sorpresa. Los Goya.

La más galardonada con diez "bustos" fue, como todos saben, "Blancanieves" de Pablo Berger donde la protagonista atormentada por su madrastra encamina su vida al mundo taurino acompañada por su grupo de enanos toreros. Blanco y negro. Música de arte. 

Pero por desgracia no es que la película se haya convertido en un manjar de negocios si no todo lo contrario, el filme se ha hecho eco en el mundo del cine por su desastrosa recaudación. Las cifras que rodean a la película roza el ridículo, se afirma que tras la obtención de los premios la productora invirtió en 142 copias más para los cines de toda España con el fin de aprovechar el tirón que había conseguido la película, pues nada, desde el día de "Los Goya" la película lleva una media de recaudación de 645€ por copia editada por la productora.

Se estima que podrá llegar a 1,3 millones de euros de caja final, nada despreciable cifra, pero ni mucho menos lo esperado para un largometraje de esa índole.

Decimos que el cine es el séptimo arte y como tal, tiene la capacidad de asombrarnos con cada nueva creación. Esta sí que es para sorprenderse.                

Madre Naturaleza

Es cierto, lo he podido comprobar, la gente que menos te lo esperas te abre la mente y te hace apreciar cosas que antes pasábamos por alto debido a esta sociedad determinada por el estrés y la velocidad. Miradas perdidas en los trenes, fijando su atención en ese artefacto llamado móvil nos muestra la impersonalidad de una conversación mantenida a base de tecleo.  

Madre Naturaleza que tanto maltratamos sin que interponga querella a trámite, simplemente se retuerce a golpe de vientos huracanados, magma, temblores tal de escalofríos y sacudidas…

Madre Naturaleza, aparece, lava nuestras conciencias que falta nos hace.

Santo Valentino

Dicen algunos, que el Santo Valentín ponía en peligro su integridad física para unir en Sagradas Nupcias a aquellos cristianos que eran perseguidos y a pesar de ello querían ser casados: ¡Bendito seas! comentaban.

Hoy en día los perseguidos somos nosotros, asumimos un bombardeo de información a base de mensajes publicitarios que nos inducen a consumir en esta santa fecha cosas tan innecesarias que pasado unos días verdaderamente no sabemos que hacer con ellas.

- "He colocado aquí la caja de música con los corazones rojos, ¿qué te parece?" dice él confiado

- "Eso no queda bien en la mesa del estudio" comenta ella

El fín de esta historia es guardarlo en el armario de los trastos junto a las herramientas de carpintería que nunca usaste o en aquel altillo que nunca se abre porque sabemos que no hay nada de utilidad.

Que no parezca un alarde de pesimismo, a pesar de todo es un día para agradecer el cariño hacia la otra persona, mostrarle nuestro sentimiento más profundo y... ¿por qué no besarse como cada día?

   

  

Metiendo el cuerpo en caja

Nacimiento; la Real Academia de la Lengua la define en su sexta acepción como "principio de algo o tiempo que empieza".

"La Caja de Tramoyas" quiere llegar a todos los lectores con sus experiencias en lo común, en lo extraordinario, en lo cotidiano,... contando historias y compartiendo costumbres, es por ello que no se trata de hacer una primera entrada en el blog de forma alargada y que su lectura sea espesa, soy de los que piensan que "lo bueno si breve dos veces bueno".

Por mi parte queda inaugurado, pero antes, me gustaría dedicar esta primera entrada a esa persona que me acompaña cada día, que me entiende y me concibe, que me juzga y me orienta, mi amiga y compañera... mi vida. Sobre seguro que a ella la veamos también por estos lares.